La artista Maribel Quiñones ‘Martirio’ ha criticado que hoy día «la industria de la música se ciñe en convertir a la mujer en un elemento erótico», cuando la música en sí es «un instrumento de gran ayuda para la igualdad de género, porque puede visibilizar, hacerte reaccionar, que revoluciones y cambies en un sentido».
Así lo ha puesto de manifiesto durante su participación en el primero de los encuentros de ‘Música y Mujer’ -que coorganizan la Universidad de Huelva y la consultora onubense CpC Cambiar para crecer-, con el que se persigue impulsar la igualdad de género y la dignificación de la mujer en todos los ámbitos sociales a través de la música, ha informado la Onubense en una nota.
En este primer encuentro, que se ha realizado de modo virtual, se ha querido analizar la imagen que la música representa de la mujer y el cómo se ajusta a los valores democráticos.
Martirio ha incidido en que la música «debe hacer pensar. Puedes adherirla o rechazarla, pero debe convertirse en un revulsivo para las emociones», por lo que ha constatado que «es un gran instrumento de ayuda para la igualdad de género».
Sin embargo, ha matizado que la música que se realiza ahora «es más peligrosa porque los mensajes llegan camuflados y no te permiten que reacciones».
Martirio ha asegurado que «hubo un momento en que la industria apoyaba los mensajes, pero ahora lo primero que mira de un artista es cuántos seguidores tiene en Instagram y se ciñe en convertir a la mujer en un elemento erótico».
Durante su intervención Martirió ha definido los sonidos de hoy como «música kleenex», ya que «hay un movimiento que está llevando a un gregarismo y una falta de reflexión sobre lo que te evoca lo que has escuchado».
«Ser artista es casi una herida abierta que la tienes que curar a base de arte; el arte tiene que meter el dedo en la herida y eso a la industria no le interesa, no le gusta que reflexiones, porque son personas conscientes, con criterio y no son objetos para consumir», ha indicado.
En el encuentro también ha estado el músico y productor musical, César López Perea, quien ha incidido en que la música es «inherente a la sociedad en la que vivimos, expresión pura de lo que somos», si bien considera que «desafortunadamente estamos en una sociedad con valores inexistentes, son mentiras».